Esta línea de financiación otorga bajo un criterio de concurrencia competitiva
que permitan asegurar que las empresas cántabras disponen de liquidez suficiente para hacer frente a sus pagos con regularidad, al objeto de garantizar el consumo de las familias cuyos ingresos corrientes dependen de ellas, preservar la estabilidad financiera de nuestro tejido productivo, y asegurar una rápida recuperación de la actividad económica una vez superada la situación de crisis sanitaria.
AUTÓNOMOS
Autónomos que tengan unos rendimientos fiscales declarados anuales inferiores a 60.000 euros netos.
MICROEMPRESAS
Sociedades con menos de diez trabajadores y un volumen anual de negocios inferior a 2.000.000 euros.